martes, 3 de agosto de 2010

AZÚCARES, COLORANTES, CONSERVANTES, EDULCORANTES...Y COMPORTAMIENTO

Pica en la imagen para poderlo ver en tamaño mayor
Mucho se ha escrito sobre la influencia de los azúcares, los edulcorantes, almidones de azúcar modificados como endulzante, de los colorantes, conservantes...y sobre sus efectos nocivos sobre la salud y el comportamiento hiperactivo de muchos niños, tanto con marchamo científico como alternativo, tanto para afirmar esa nocividad como para decir que no se ha demostrado (entiéndase que no se suele decir que no existe, sino que no ha podido ser demostrado).

Lo que sí es totalmente cierto, es el uso y abuso que en la mayoría de los productos alimenticios industriales se hace de todos estos añadidos, sobre todo dirigido a población en edad infantil.

Recuerdo una vez que me paré a leer la microscópica letra del envoltorio de unos chicles "sin azúcar" pero con cosas peores. Advertía que ese tipo de chicles no eran recomendados para menores.

Y ahora me he topado en el envoltorio de un polo de una conocida marca de chupetes la siguiente advertencia: "...puede tener efectos negativos sobre la actividad y la atención de los niños..." (ver ampliando la imagen).

Si la propia empresa lo llega a plantear, aunque se con la boca ultrapequeña (entiéndase letra tipo word 3) a que esperamos los enseñantes para profundizar en las propuestas que en este sentido estemos realizando de Educación para la Salud.

Necesitamos, en los tiempos que corren, una Educación para la Salud y el Consumo que sea crítica, que se documente, que contraste. Aunque sólo fuera por tener alumnos con un comportamiento más estable.

Y para esto, que mejor herramienta que la red, que aprender a usarla, a usar sus medios de difusión de ideas (blogs, redes sociales, material audiovisual...). Para aprender a contrastar informaciones, para separar el trigo de la paja, aprendiendo a diferenciar incluso cuando la científica puede estar maleada por lo económico, anteponiendo el negocio sin escrúpulos a la salud de los ciudadanos.

Conocidos son muchos escándalos de farmacéuticas con engañosos estudios sobre medicamentos, de petroleras pagando informes pseudocientíficos para desmentir la existencia del cambio climático y mucho más ejemplos.

Ya sé que a la enseñanza se le cuelgan todas las responsabilidades y más, pero para que un ciudadano sea libre, debe saber elaborar un criterio propio con el mayor de los fundamentos, porque la decisión última de las cosas que le afecten, lo sepa o no, debe ser suya.
ALIMENTACIÓN Y NUTRICIÓN CELULAR PARA COMBATIR LA HIPERACTIVIDAD Y TRASTORNOS DE APRENDIZAJE
Añado el vídeo aportado por Yolanda. Gracias Yolanda

Videos tu.tv

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Buena entrada, J.J.
Ya no es un secreto para nadie que el azucar es un sustituto de ciertas carencias emocionales (así como el chocolate se dice que es el sustituto del sexo).

A modo de curiosidad os dejo este vídeo sobre la elaboración de caramelos naturales. Después de verlo te cambia la percepción a la hora de comerte uno...

http://tu.tv/videos/asi-se-hace-golosinas

Saludos.

Anónimo dijo...

¿Habeis oído hablar de la dieta Feingold?

Hace más de 30 años, el doctor Ben Feingold, alergólogo y pediatra norteamericano, desarrolló una dieta libre de aditivos (colorantes artificiales, potenciadores del sabor, conservantes...) y salicilatos (“parientes” del ácido acetilsalicílico, presentes en ciertas frutas y verduras). En su opinión, esta dieta podía prevenir ciertas alergias infantiles. Para su sorpresa –y la de los padres de los niños tratados– muchos de los menores que la siguieron no sólo mejoraron sus síntomas de alergia, sino que experimentaron cambios muy positivos en su comportamiento. Niños problemáticos, inquietos y con escasa capacidad de concentración y atención –signos del trastorno de déficit de atención con hiperactividad–, mejoraban en todos esos parámetros.

Saludos.

Jesús Hernández dijo...

Gracias Yolanda por tus aportaciones. Añado el vídeo y de la dieta que comentas no tenía ni idea. Buscaré información por curiosidad. Un saludo