domingo, 2 de enero de 2011

EL ALACRÁN.

No cambies tu naturaleza si alguien te hace daño, sólo toma precauciones.
Algunos buscan la felicidad, otros la rechazan. No olvides esto.
No permitas jamás que la conducta de otras personas decida la tuya.

2 comentarios:

Julita Fernández dijo...

Está bien que alguien nos lo recuerde de vez en cuando, aunque es un poco difícil llevarlo a la práctica ¿no crees?
Un abrazo

Jesús Hernández dijo...

Que existen personas que lo ponen realmente difícil es un hecho. Tampoco creo que uno deba hacerse un harakiri ni flagelarse, sólo se trata, que no es poco, en entrenarnos para que esas personas no condicionen nuestra respuesta ni cambien nuestro día. Difícil, pero intentable.